En el barranco hubo seis molinos en total. Si subimos por el barranco desde el Pont estaban el molino Chiquet (desaparecido), el molí Nou, el Molí del Vicari (desaparecido), el de la Tía Roseta, el molino de la Peña y el molino de Petuta o del Cup. Aguas abajo, en la partida del Secanet se sumaban dos más: el Molino de la Balsa (desaparecido) y el Molino de Papel.
Los molinos se situaban a lo largo de la acequia que discurre por el barranco, consiguiendo la altura necesaria para llenar el cup y mover los rodeznos, y, con ellos, las muelas para moler.
La referencia más antigua sobre molinos en Ibi data de mediados del siglo XIV. Entonces sólo existía el Molí de la Balsa. El segundo más antiguo es el de la Peña, de 1511. Entre los años 1533 y 1536 exiliados venidos de Jijona por la Guerra de las Germanías erigieron el Molino del Cup, el Molino de la Tía Roseta, el Molí del Vicari y el Molí Chiquet. El Molí Nou se estableció en 1830 y el Molino de Papel en 1859.
Los propietarios de los molinos estaban representados en la Comunidad de Regantes y tenían asignado un número de horas dentro de las tandas de riego. En las ordenanzas del Riego de 1879 les correspondían cincuenta y cinco horas en total.